Todo jugador de baloncesto que se precie debe haber visto esta película. Todo fanático de Michael Jordan debe haber visto esta película innumerables veces. Todo fanático del baloncesto debe haber gastado el VHS, debe saberse las escenas de memoria, debe emocionarse con la banda sonora.
Esto me pasa a mí, y es que esta película de la infancia de muchos protagonizada por Michael Jordan y Bugs Bunny tiene algo que no tienen la mayoría de las películas (de baloncesto y generales), que es el desarrollo de la euforia.
Os dejo los temas más significativos de la película:
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